Hay muchas maneras de vivir nuestro propósito, ayudando a los más necesitados, compartiendo lo que tenemos y haciendo lo imposible por transformar esta segunda ola de pandemia en una #OlaDeSolidaridad.
En un mar de desafíos, ¿cómo una ola puede marcar la diferencia?
COVID-19 ha traído desafíos sin precedentes a nuestras vidas personales y profesionales. La pandemia ha tomado al mundo por sorpresa y ha impactado la salud, los empleos, las economías y la conexión con la sociedad, las familias y más.
Sabemos que no podemos controlar las fuerzas de la naturaleza, pero podemos controlar cómo respondemos. La pandemia global ha sido un acelerador del cambio, y aunque nos ha mantenido separados físicamente, también nos ha acercado para dar forma a un nuevo futuro. Para EY, ha significado la puesta en acción de nuestro propósito, a través de la solidaridad de nuestra gente y nuestra capacidad para rediseñar lo que es posible con acciones tanto grandes como pequeñas, que están ayudando a construir un mejor mundo, incluso mejor que antes.
Nos enorgullece compartir las historias de cómo nuestra gente continúa inspirando a los demás, ayudando a las comunidades y transformando esta segunda ola de pandemia en una #OlaDeSolidaridad. Porque buscamos transformar el destino de nuestro país, no queremos conformarnos viviendo así. Toca no ser indiferentes ante las estadísticas diarias; más bien, toca actuar y ayudar dando de sí antes de pensar en sí.
Les presentamos la #OlaDeSolidaridad. Hagamos que más personas se suban a esta ola, a esta iniciativa que nos contagia de confianza: la fe que mueve montañas, que añade camas, que instala oxígeno y ventiladores mecánicos, que entrega kits de protección personal, que dona víveres y que consigue lo que haga falta. Una ola que nos contagia de vida, inflando nuestros pulmones de optimismo y de acciones concretas.
Porque en tiempos difíciles es mejor estar unidos para construir un mejor mundo. Porque el Perú somos todos, los invito a subirse a la #OlaDeSolidaridad.