Uno de los errores más frecuentes es considerar que, si se crea una dirección de sostenibilidad (un Chief Sustainability Officer), ya tenemos el problema resuelto.
El gran problema es que la sostenibilidad no es exclusivamente una función vertical sino que tiene que incorporarse en todos los procesos de gestión de la compañía. Por eso es muy útil diferenciar dos etapas diferentes a la hora de implantar programas de sostenibilidad
Por tanto, conviene identificar qué órganos son clave para implantar cualquier función que implique a toda la organización y asignarles tareas concretas. Tal y como describimos en el documento en el documento de EY “¿Cómo puede un Consejo de Administración fortalecer el buen gobierno para acelerar la trayectoria ESG?”, hay tres órganos que tienen que intervenir para implantar la sostenibilidad: el Consejo de Administración; el Comité de Dirección; y el Director de Sostenibilidad
¿Qué rol corresponde el Consejo de Administración en materia de Sostenibilidad? A diferencia de los órganos de gestión, en España este órgano de gobierno tiene bien definidas sus funciones tanto a través de normas de obligado cumplimiento como, en el caso de sociedades cotizadas, por virtud de las recomendaciones contenidas en el Código de Buen Gobierno. En resumen, corresponde al Consejo fijar la dirección y estrategia de la compañía en materia de sostenibilidad y su alineación con la estrategia corporativa, asegurar la integración de los factores ESG en la gestión de los riesgos y en los procesos de toma de decisiones y el establecimiento de los correspondientes mecanismos de control y supervisión sobre los órganos de gestión en esta materia
¿Qué rol juegan el Comité de Dirección (o Comité Ejecutivo), sus componentes y los órganos dependientes de él como los comités operativos funcionales)? Aunque no existe regulación dirigida a estos órganos y cada empresa se organiza de la manera que considera más adecuada para ejecutar la estrategia diseñada por el Consejo, al Comité de Dirección corresponderían, entre otras, las siguientes acciones: alinear los planes business as usual de todas las unidades de negocio y de las áreas funcionales corporativas (marketing, finanzas, compras, operaciones, jurídico, fiscal, etc) con los objetivos establecidos de sostenibilidad; proponer objetivos concretos ESG; incorporar a su propio cuadro de mando (y hacerse responsable) los objetivos de sostenibilidad. correspondientes y rendir cuentas de los resultados obtenidos en su ámbito de gestión ante los Órganos de Gobierno correspondientes. En definitiva, se trata de que todos los órganos de gestión asuman como propios los planes, metas y objetivos de sostenibilidad de forma trasversal en todas las áreas de gestión.
¿Qué corresponde al Chief Sustainabilility Officer (o director de Sostenibilidad)? El responsable de sostenibilidad, como algunas otras áreas funcionales, debería desempeñar un doble rol. El primero de ellos, un rol vertical, dirigido a liderar el ejercicio de aquellas funciones que impactan en toda la organización como, por ejemplo, la definición de la propuesta de estrategia de sostenibilidad para su elevación al Consejo; la coordinación del proceso de transparencia de la información en materia de sostenibilidad ; la definición del contenido de las políticas, normas, y procedimientos ESG; la realización del análisis de doble materialidad que, además, con la Propuesta de Directiva de Información Corporativa en materia de Sostenibilidad (CSRD, por sus siglas en inglés) será obligatoria para las empresas afectadas por ella; la fijación de los procedimientos de dialogo y comunicación con los stakeholders; el impulso y la coordinación en la elaboración del mapa de riesgos no financieros; el conocimiento e implantación de los estándares ESG; proporcionar a la organización conocimiento experto en ESG y presentar a la compañía a los índices ESG.
El segundo rol, y quizá más complejo desde el punto de vista de gestión, es el rol transversal, y su objetivo fundamental es apoyar a todas las áreas funcionales a implantar la sostenibilidad en sus ámbitos de responsabilidad, con todo lo que ello supone. De alguna manera, se trata de actuar como lo hacen los Business Partners en las áreas de Recursos Humanos, “pegándose” al negocio y apoyándoles en todo lo que los gestores necesiten
Entendiendo ese modelo de gobernanza… ¿Por dónde empezar? Si el 80 % de tus emisiones de Alcance 3 provienen de tus proveedores, la adquisición debe ser una prioridad máxima. Si estás operando con activos que consumen mucha energía a largo plazo, la inversión será una cuestión prioritaria.
Eso se traduce en un proceso de trabajo eficiente: el Consejo incorpora ese indicador en su cuadro de mando, fija un objetivo y realiza su rol de control y supervisión; los responsables de compras y el de operaciones incorporan ese objetivo entre sus objetivos diarios (por el que, además, obtienen parte de su retribución); y el director de sostenibilidad, ayuda al consejo y a los directores funcionales a que se logre ese objetivo.
Coloca la sostenibilidad en el centro de tu modelo operativo