EY cfo- frs nov 23

No es noticia: el mundo está cambiando. ¿Y los CFO con él?

En la actualidad el papel del CFO está evolucionando hacia una codirección del negocio junto con el CEO y otros miembros de la dirección ejecutiva.

El CFO sigue siendo el responsable de facilitar la información corporativa y financiera a los grupos de interés y usuarios de dicha información, ya sean externos o internos. Pero cada vez se le está pidiendo más proactividad. En la actualidad el papel del CFO está evolucionando hacia una codirección del negocio junto con el CEO y otros miembros de la dirección ejecutiva.

En esta evolución, el CFO va a tener que lidiar con un entorno cada vez más complejo y contradictorio. Y en la incertidumbre surgen muchas preguntas: ¿se debe priorizar la inversión a corto o a largo plazo?, ¿ponemos el foco en el riesgo o en la oportunidad? y, ¿innovamos en nuestra estrategia o seguimos con lo que nos ha funcionado bien hasta ahora? El resultado de cada una de estas preguntas marcará el futuro de la empresa y del departamento financiero.

La mejor respuesta depende de las prioridades que se elijan: concentrarse en las finanzas corporativas o dar un paso más hacia un perfil más estratégico-comercial que actúe en armonía con el resto de los departamentos. En la balanza deberemos colocar desde la aversión al riesgo a la ambición profesional y la intuición para obtener nuevas oportunidades en este entorno tan cambiante del que formamos parte, queramos o no.

¿Corto o largo plazo?

Priorizar la inversión a corto plazo es una incongruencia empresarial para la dirección financiera y su empresa en el futuro. Recortar inversión en áreas categorizadas como estratégicas en el largo plazo, como pueden ser los criterios ESG (medioambiente, social y gobernanza, por sus siglas en inglés), o las nuevas tecnologías como la inteligencia artificial podrían afectar al crecimiento a largo plazos, incluso a la supervivencia empresarial.

El papel del CFO pasa por liderar la comunicación y la coordinación con los ejecutivos de las diferentes áreas de la compañía, especialmente con aquellas donde se deciden las inversiones. Sin duda, la empresa necesita el rigor del dato, la capacidad de análisis y proyección de resultados futuros del CFO. Sin ello, no se puede dar seguridad y precisión para estructurar el valor añadido a futuro de estas inversiones.

¿Ponemos el foco en el riesgo o en la oportunidad?

Para que la toma de decisiones sea lo más estratégica posible, el dato con el que se toman debe tratarse y recogerse de la mejor forma posible. Esto provoca un gran reto para el departamento financiero, pues recibe la información del resto de departamentos de una forma, a menudo, muy heterogénea. Además, debe gestionar un alto volumen de información en un periodo corto de tiempo. La automatización de procesos y reporte, entrando en detalle, evidencia un cambio de actitud que puede conducir a una diferencia competitiva frente a otros. Aquellos directores financieros reticentes al riesgo deben priorizar áreas concretas y no adoptar una transformación digital completa. Para ello deben establecer competencias y responsabilidades precisas que acompañen a una experiencia más segura en el impulso de la innovación.

¿Liderazgo estratégico o habilidades tradicionales?

Nadie se sorprenderá al hablar del salto natural a director general por parte del director financiero. La búsqueda actual de nuevos perfiles de CFO no demanda un conocimiento en finanzas tradicionales. El perfil demandado por las compañías para esta responsabilidad combinan capacidades variadas que les hace comprender mejor las operaciones de su empresa: visión estratégica, conocimiento del sector, entendimiento del negocio, liderazgo, talento, sistemas. En alguna ocasión hemos escuchado que ya no solo es un notario del pasado, sino que tiene que ser un estratega del futuro.

Abrazar la evolución de la función financiera

El tiempo es limitado. La agenda está cargada. Pero es el momento de parar un segundo y reflexionar. Hacernos las preguntas adecuadas para obtener la mejor respuesta. El CFO es una pieza clave para que la empresa tenga éxito y cree valor añadido a todos los niveles. El plan que diseñe ahora, sin ninguna duda, será el futuro de la empresa.


Resumen

Cada vez se le está pidiendo más proactividad a los CFO. En la actualidad su papel está evolucionando hacia una codirección del negocio junto con el CEO y otros miembros de la dirección ejecutiva. En esta evolución, debe lidiar con un entorno cada vez más complejo y contradictorio. Y en la incertidumbre surgen muchas preguntas. El resultado de cada una de ellas marcará el futuro de la empresa y del departamento financiero.

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