I Gobernanza y supervisión
El reporte de sostenibilidad es clave para alinear la estrategia corporativa con objetivos de sostenibilidad permitiendo una transformación en el modelo de negocio de las empresas al ayudar a establecer objetivos, ejecutar iniciativas, medir el desempeño, identificar y afrontar los riesgos y las oportunidades, así como, construir relaciones duraderas con las partes interesadas.
Los Comités de Auditoría son los responsables de supervisar el proceso de reporte de sostenibilidad, velar por mantener la integridad en la presentación de los informes, gestionar los riesgos de las compañías, hacer un seguimiento de la verificación externa e informar a los Consejos de Administración de los resultados y recomendaciones.
Los Consejos de Administración y los Comités de Auditoría tienen la decisión última de interpretar el reporte de sostenibilidad como un ejercicio de cumplimiento o una transformación estratégica hacia un modelo de negocio sostenible e innovador a través de herramientas como la Inteligencia Aritificial (IA) y la Inteligencia Artificial Generativa (GenAI).
Algunas recomendaciones para los Consejos de Administración implican identificar si la empresa tiene impactos sociales y/o ambientales materiales para integrarlos en la estrategia a largo plazo de la empresa sin que afecte a los beneficios a corto plazo, así como, interpretar el reporte en CSRD como una acción de proactividad ante un camino aún en desarrollo y con perspectivas de mejora. Por otro lado, los Comités de Auditoría pueden explorar oportunidades de desarrollar un reporte más transparente y establecer una comunicación fluida con inversores y otras partes interesadas respecto a las decisiones en materia de gobernanza.
II Alineación de estrategias y gestión de riesgos
La Directiva CSRD presenta oportunidades de transformar los modelos de negocio de las empresas fomentando su crecimiento, desarrollo y gestión de las amenazas debido a que las empresas sostenibles obtienen ventajas como eficiencia operativa, resiliencia, atracción de talento, innovación, acceso a nuevos mercados y confianza de las partes interesadas. Además, la CSRD busca que las empresas obtengan financiamiento más eficiente y rentable para la transición ecológica mediante la presentación de informes de sostenibilidad. Por tanto, ayudará a bancos e instituciones financieras a incorporar mejor el riesgo climático y la sostenibilidad en sus estrategias y gestión. Los reportes proporcionarán datos de sostenibilidad detallados para la toma de decisiones, el cumplimiento regulatorio y la mejora de modelos de crédito con criterios de sostenibilidad.
Sin embargo, los altos niveles de transparencia requeridos conllevan riesgos que se relacionan con la forma en que establecen objetivos estratégicos y comunican esos objetivos a sus partes interesadas. Las empresas deben revelar cómo adaptarán sus modelos de negocio para una economía sostenible y limitar el calentamiento global a 1,5 °C, conforme al Acuerdo de París. Esto se alinea con la futura Directiva de Diligencia Debida en Sostenibilidad Corporativa de 2026. Con más divulgación sobre estrategias de sostenibilidad, las empresas enfrentarán más presión para lograr resultados en mitigación del cambio climático y sostenibilidad. Es por ello que los Consejos de Administración deben establecer unos objetivos realistas para llevar a buen fin sus planes estratégicos.
Algunas de las recomendaciones para los Consejos de Administración incluyen el emplear los informes de sostenibilidad para identificar riesgos y oportunidades de sostenibilidad en los negocios, lo que ayudará a guiar la transición hacia prácticas sostenibles y a adaptar los modelos de negocio para capitalizar las oportunidades. Además, las empresas deben apoyarse de la IA y la GenAI para impulsar la transformación sostenible de la empresa y estar al tanto de los riesgos ESG relacionados con la IA para mitigarlos.
Las recomendaciones para los Comités de Auditoría radican en establecer una estrategia en la cual la empresa registre, evalúe y gestione los riesgos y oportunidades de sostenibilidad durante la recopilación de datos para informes, e integrar estos riesgos en los procesos actuales de gestión de riesgos y control interno.
III Reporte de sostenibilidad
El cumplimiento de la CSRD plantea desafíos de reporte para las empresas, con los Consejos de Administración trabajando con la gerencia para abordar problemas que podrían afectar el cumplimiento y gestionando las expectativas de las partes interesadas, como inversores, ante posibles incumplimientos o limitaciones en los informes de aseguramiento. Los Consejos de Administración, junto con los Comités de Auditoría, están ayudando a las empresas a abordar y gestionar los posibles retos de reporting:
- Análisis GAP. Hasta ahora, y por impulso de las Directiva 2014/95, de informacion no financiera y diversidad, las empresas reportaban información de sostenibilidad según marcos como GRI y SASB. Ahora realizan análisis GAP para alinear sus reportes anteriores con los requisitos más estrictos del CSRD y con los Estándares Europeos de Sostenibilidad (ESRS en sus siglas en inglés) o Normas Europeas sobre Información de Sostenibilidad (NEIS), publicados en el Reglamento Delegado (UE) 2023/2772, lo que puede requerir información adicional y nueva sobre temas no reportados previamente. Este análisis GAP ayuda a los Consejos de Administración a evaluar la preparación de la empresa para la CSRD, además de identificar fortalezas y debilidades en la obtención de información de sostenibilidad en las diferentes jurisdicciones donde opera.
- Evaluación de Doble Materialidad. La Doble Materialidad, que evalúa cómo las cuestiones de sostenibilidad afectan financieramente a las empresas (materialidad financiera) y cómo éstas impactan en la sociedad y el medio ambiente (materialidad de impacto), es un reto clave en el cumplimiento de la CSRD. Los Consejos de Administración ya han impulsado la realización de evaluaciones de Doble Materialidad para determinar la relevancia y disponibilidad de los datos de sostenibilidad que deben reportar. Para determinar qué aspectos son materiales, las empresas han consultado a sus grupos de interés por aquellos temas más relevantes como pueden ser los recursos, residuos, competencia por talento, diversidad, emisiones, derechos humanos y gestión del agua. El reto es identificar los asuntos más críticos, especialmente en empresas con múltiples entidades en distintas regiones. Los datos de la evaluación de Doble Materialidad deben integrarse en la gestión de riesgos y la estrategia empresarial.
- Recopilación de datos La preparación para la CSRD supone un reto en la recopilación de datos para las empresas, ya que necesitan reunir mucha información, pero los datos y procesos para la sostenibilidad son menos maduros que los financieros. Los datos de sostenibilidad pueden estar dispersos y carecer de controles rigurosos, lo que afecta su integridad. Las empresas se sienten más seguras reportando datos de personal y emisiones de Gases Efecto Invernadero (GEI) de alcance 1 y 2 que otros temas como biodiversidad y economía circular. Las empresas ahora deben reportar temas previamente considerados sensibles y a menudo carecen de herramientas eficientes, dependiendo de métodos manuales como correos y hojas de cálculo. Además, la CSRD exige reportar emisiones de GEI de alcance 3, lo cual es difícil y consume tiempo al requerir datos de calidad de toda la cadena de valor. También puede haber resistencia a compartir estos datos por miedo a presiones para cambiar sus modelos de negocio. Por esta razón, los Consejos de Administración buscan asegurar la calidad de los informes de sostenibilidad para proteger los riesgos de la empresa, y confían en los Comités de Auditoría, con su experiencia en controles internos financieros, para garantizar la precisión, fiabilidad y cumplimiento normativo de estos informes. El control de la información de sostenibilidad debe ser tan riguroso como el de la información financiera, con la auditoría interna apoyando a los Comités de Auditoría para fortalecer los controles, asegurando que las políticas y procedimientos incluyan controles internos adecuados y que exista una gestión de riesgos y gobernanza efectivas.
- Métricas La medición de datos de sostenibilidad varía y no es tan consistente como la financiera y las interpretaciones divergentes de la taxonomía de la UE dificultan la comparación de datos entre empresas. Además, la CSRD requiere que las empresas recolecten mucha información cualitativa, que debe ser gestionada continuamente para poder reportarla adecuadamente en los informes de sostenibilidad. Las empresas deben considerar cómo comunicar una narrativa auténtica y significativa con la gran cantidad de información que reportan. Los Comités de Auditoría están ofreciendo apoyo crucial, supervisando las definiciones y metodologías de las métricas de sostenibilidad.
- Interpretación de los ESRS (European Sustainability Reporting Standards). Las Normas Europeas de Información sobre Sostenibilidad (NEIS o ESRS en inglés) son complejas y difíciles de interpretar para las empresas, y su naturaleza genérica plantea desafíos para sectores específicos como los servicios financieros. El EFRAG (European Financial Reporting Advisory Group) está trabajando en normas sectoriales para facilitar la divulgación específica por sector. La especificidad de los ESRS también dificulta a las empresas que previamente reportaban bajo marcos voluntarios y que ahora deben ajustar sus métricas y enfoques. Las empresas deben interpretar los ESRS de manera similar a sus competidores para que sus informes de sostenibilidad sean comparables. Los Comités de Auditoría supervisan para garantizar que la interpretación de las normas sea coherente con la de sus homólogos en el sector.
- Interoperabilidad con los estándares ISSB (International Sustainability Standards Board). Los ESRS 2 y ESRS E1 son los dos estándares de informes inaugurales emitidos por el Consejo de Normas Internacionales de Sostenibilidad (ISSB) que corresponden a los estándares IFRS S1 e IFRS S2, enfocados en divulgaciones generales y cambio climático. Aunque la UE y el ISSB han colaborado para que ambos conjuntos de normas sean interoperables, existen diferencias que las empresas deben identificar para cumplir con todos los requisitos al reportar en ambos marcos. Actualmente, la correlación entre los estándares del ISSB y el ESRS se limita al ámbito del clima, sin equivalentes del ISSB para las normas sociales, de gobernanza y medioambientales no climáticas de la UE. Se espera que la convergencia total entre ambos conjuntos de estándares tome tiempo; para ello, en mayo de 2024, la IFRS Foundation y EFRAG han publicado una guía conjunta de interoperabilidad para poner de manifiesto el “alto nivel de alineación” logrado entre las Normas Internacionales de Divulgación de Sostenibilidad del ISSB y las Normas Europeas de Informes de Sostenibilidad (ESRS). Los Comités de Auditoría están analizando las similitudes y diferencias entre ambos, y en casos de divergencias, están colaborando con comités de otras empresas del mismo sector para lograr divulgaciones consistentes.
- Verificación limitada. La verificación limitada busca dar confianza a los usuarios de que la información reportada no contiene errores materiales significativos, aunque no ofrece tanta seguridad como la verificación razonable empleada en auditoría financiera. Bajo la CSRD, los informes de sostenibilidad deben someterse a una verificación limitada por un auditor o proveedor de servicios de aseguramiento. Esto incluye la evaluación de Doble Materialidad y la Taxonomía de la UE. Es crucial que las empresas colaboren con su proveedor de auditoría desde el inicio para alinear expectativas y que el Comité de Auditoría supervise este proceso. Las empresas tienden a usar su auditor legal para la verificación de la información de sostenibilidad debido a que la declaración de sostenibilidad es parte del informe de gestión que ya está siendo revisado por el auditor, lo que facilita la coherencia con los estados financieros. Además, hay sinergias al discutir la información una sola vez y aplicar el conocimiento del negocio a ambos informes. Las normas de independencia aplicadas a la auditoría financiera también se extienden al aseguramiento de la sostenibilidad bajo la CSRD, lo que hace que las empresas prefieran no arriesgar la pérdida de servicios de proveedores que no son su auditor legal.
- Colaboración y gestión del cambio. El cumplimiento de la CSRD es un esfuerzo colaborativo que involucra a múltiples departamentos como finanzas, recursos humanos, legal, relaciones públicas, compras y sostenibilidad. Algunas empresas han formado comités de divulgación con representación de todas estas áreas. La colaboración entre finanzas y sostenibilidad es crucial para lograr informes de alta calidad, aprovechando la experiencia en reportes rigurosos y conocimientos especializados en sostenibilidad e incluyendo la conversión de datos de sostenibilidad a términos monetarios. Es crucial la colaboración entre los Comités de Auditoría y Sostenibilidad de la Junta Directiva, a menudo facilitada por la participación cruzada de sus presidentes o miembros en las reuniones del otro comité. Tener un CFO y un CSO competentes es clave para el éxito en la gestión del cambio hacia la sostenibilidad. La implementación de la CSRD representa un significativo ejercicio de gestión del cambio, requiriendo que quienes estaban enfocados en informes financieros aprendan sobre la información no financiera y su regulación, y que aquellos con experiencia en reportes de sostenibilidad bajo marcos voluntarios se adapten a normativas más estrictas.
IV Participación de las partes interesadas
Los informes de sostenibilidad son clave en la transición hacia prácticas más sostenibles, ya que narran la transformación real de la empresa. Los Consejos de Administración saben que reportar de manera fiable y de calidad sobre la sostenibilidad fortalece la confianza con las partes interesadas y es esencial para ejecutar su estrategia, siendo especialmente valioso para los inversores que buscan comparar el desempeño en sostenibilidad y esperan informes no financieros al mismo nivel que los financieros.
El 99% de los inversores encuestados en el EY 2022 Global Corporate Reporting and Institutional Investor Survey consideran los informes de sostenibilidad en su proceso de toma de decisiones de inversión. Sin embargo, el 80% cree que muchas empresas no explican bien la lógica de sus inversiones en sostenibilidad, dificultando la evaluación de dichas inversiones. Los Consejos de Administración están utilizando los informes de sostenibilidad para comunicarse con inversores y otras partes interesadas, asegurándose de que las divulgaciones cumplan con las expectativas y monitoreando si se reportan los temas relevantes con las métricas y detalle esperados, y también buscan entender y atender las necesidades de información variadas de las partes interesadas.
IV Formación y competencia
El desafío de la CSRD ayuda a concienciar a los Consejos de Administración de la importancia de profundizar en el conocimiento en materia de sostenibilidad fomentando las habilidades y destrezas para una buena presentación de informes de sostenibilidad, lo cual implica entender la calidad de los datos y las diferencias entre información financiera y no financiera, así como supervisar los controles de los datos de sostenibilidad.
Los comités de dirección buscan asesoramiento de expertos internos y externos para profundizar en temas de sostenibilidad y desarrollar estrategias al respecto, mientras que los Consejos y los Comités de Auditoría profundizan en sus habilidades no financieras. Además, la juntas directivas mantienen diálogos con auditores externos y consultores, y participan en eventos para aprender e intercambiar prácticas con otros profesionales. Para liderar efectivamente en sostenibilidad y cumplir con la CSRD, están evaluando su composición y, de ser necesario, incorporando nuevos miembros con experiencia en sostenibilidad.