La transformación de la industria de la construcción a través de la sostenibilidad

El sector se encuentra en un punto de inflexión donde debe adoptar prácticas y tecnologías sostenibles para cumplir con las expectativas regulatorias y contribuir significativamente a la lucha contra la crisis medioambiental global

El sector de la construcción e ingeniería se enfrenta a una demanda cada vez mayor de descarbonización y prácticas respetuosas con el medio ambiente. En este contexto, las organizaciones y sus líderes deben reconocer y responder rápidamente a estas demandas, impulsadas tanto por las regulaciones como por la creciente conciencia ambiental.

Los reguladores están endureciendo la legislación relativa a los riesgos y oportunidades ambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés). Esto está obligando a las empresas a medir e informar sobre el consumo de energía y agua, los residuos, las emisiones de carbono y los riesgos del cambio climático de los activos. Además, las políticas y los códigos de construcción también se están modificando y actualizando para apoyar el camino del sector de la construcción hacia la neutralidad de carbono (net zero). En este sentido, las empresas de ingeniería y construcción tienen un papel crucial en la lucha contra la crisis ambiental con la oportunidad de regenerar recursos y acelerar el desarrollo socioeconómico.

Una de las principales tendencias que están dando forma a la transformación de los criterios ESG en el sector es la construcción circular. La economía circular representa un modelo innovador de producción y consumo diseñado para garantizar la sostenibilidad de los procesos a largo plazo. En el caso particular de este sector implica diseñar, construir y operar estructuras de una manera que maximice la reutilización y el reciclaje de materiales y componentes y extienda la vida útil y la funcionalidad de los edificios y estructuras.

Otra tendencia importante son los materiales de construcción sostenibles y avanzados, ya que aportarán una mayor eficiencia y reciclabilidad. Los nuevos materiales sostenibles pueden ayudar a reducir la cantidad de carbono incorporado que contiene un edificio. El carbono incorporado se refiere a las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas con el proceso de construcción, incluida la producción, la logística y la instalación de materiales de construcción. Se han desarrollado nuevos materiales de construcción y se han actualizado los existentes para allanar el camino para reducir las emisiones de carbono e impulsar la eficiencia energética, como, por ejemplo, la fibra de carbono, aislamiento ecológico o cemento alternativo.

La aceleración de la transformación digital en la construcción es otra de las tendencias clave. La tecnología está permitiendo soluciones respetuosas con el medioambiente desde las fases iniciales de la construcción hasta garantizar la eficiencia energética. El diseño sostenible será fundamental a medida que las empresas de construcción intenten reducir su consumo de energía en los edificios terminados. La industria de la construcción debe implementar prácticas sostenibles de diseño, ingeniería y construcción impulsadas por datos aplicables para rastrear, medir y reducir las emisiones y los residuos a lo largo del ciclo de vida del proyecto.

En este sentido y con el propósito de impulsar la digitalización con el fin de evolucionar el sector hacia una estructura más automatizada, perfeccionada y eficaz, existen cada vez un mayor número de empresas emergentes denominadas ConTech que se están posicionando como el motor de la innovación en la industria de la construcción. Este tipo de empresas emergentes pretenden transformar la industria aplicando y desarrollando herramientas avanzadas como la Inteligencia Artificial, Robótica, IoT, Blockchain, o Realidad Virtual, entre otras.

El sector se encuentra en un punto de inflexión donde debe adoptar prácticas y tecnologías sostenibles para cumplir con las expectativas regulatorias y contribuir significativamente a la lucha contra la crisis medioambiental global. Las empresas que se adapten rápidamente a estas tendencias no solo estarán cumpliendo con su responsabilidad ambiental y social, sino que también se posicionarán como líderes en un mercado cada vez más consciente de la importancia de la sostenibilidad.