Uno de los puntos más destacables de nuestro análisis es que la bajada experimentada por los principales índices bursátiles a lo largo de 2022 parece no tener su origen en una disminución de las previsiones de beneficios realizadas por los analistas. Los beneficios futuros de las compañías cotizadas medidos como los Earnings Per Share (“EPS”) se han mostrado estables durante 2022, debido al decalaje entre la evolución del entorno macroeconómico y la actualización de las previsiones de los analistas. Por otro lado, el incremento del riesgo total exigido por los inversores se ha incrementado durante este año. A efectos ilustrativos, desgranamos el riesgo total exigido entre la tasa libre de riesgo y la prima de riesgo del mercado. En este sentido, se observa que la rentabilidad de los bonos gubernamentales emitidos a 10 años, a menudo tomado como referencia para el cálculo de la tasa libre de riesgo, ha subido de forma destacable en las geografías analizadas a lo largo de 2022.
Durante el tercer trimestre de 2022, se observa una bajada de las yields en el mes de julio junto con un incremento de los índices bursátiles, motivado por un descenso en las expectativas de inflación a largo plazo por parte del mercado. Sin embargo, la publicación de datos de inflación a finales de ese mismo mes y del mes de agosto, provocaron un incremento mayor de las yields de los bonos con el consiguiente descenso de los índices bursátiles. Con ello, a final de Q3 2022, las yields de los bonos gubernamentales de España, Alemania y Estados Unidos superaron los niveles de Q2 2022, mientras que el efecto sobre los índices bursátiles de dichas geografías fue de deprimir las cotizaciones a niveles inferiores a los del trimestre anterior.
Además, se muestra una comparativa entre el riesgo total exigido por los inversores y del base borrowing rate en España a 31 de diciembre de 2021 con el riesgo total exigido a 30 de septiembre de 2022, con el fin de mostrar la evolución de los principales parámetros que forman el Coste del Equity y el Coste de la Deuda, respectivamente.
En nuestro análisis, se observa que la correlación inversa que existe entre la rentabilidad de los bonos estatales y la evolución de los índices bursátiles se ve afectada en épocas de movimientos acelerados en las políticas monetarias. El incremento explosivo de la inflación en las principales economías ha provocado un ritmo acelerado de políticas monetarias restrictivas, a través de subidas verticales de los tipos de interés por parte de los principales Bancos Centrales. Estas subidas de tipos de interés junto con las expectativas de nuevas subidas empujan al alza las yields de los bonos y las curvas de Euribor, entre otros factores.
En épocas de incertidumbre, como serían las crisis derivadas de la COVID-19 y del conflicto de Rusia y Ucrania, el diferencial existente entre los bonos corporativos denominados investment grade y los bonos denominados high-yield se incrementan significativamente.
En cuanto a la evolución bursátil de los diferentes sectores existentes en los índices analizados, se observan dinámicas similares. Destaca la bajada significativa experimentada por sectores tradicionalmente más procíclicos como el consumo discrecional o sensibles a tipos de interés como el Real Estate. Por otro lado, a pesar de que se ha producido un descenso de la capitalización bursátil de todos los sectores con respecto a inicio del año 2022, dos sectores han sufrido una menor caída: (i) el sector de Energía y Utilities, el cual se ha visto beneficiado por la reducción de la oferta energética desencadenada por el conflicto de Rusia y Ucrania y (ii) el sector financiero, debido a que la subida generalizada de tipos de interés permitirá incrementar los márgenes financieros de los bancos.
Finalmente, las betas de los sectores más resilientes han experimentado ligeras bajadas durante 2022, derivado de la atracción de capital que generan dichos sectores en tiempos de incertidumbre en los mercados financieros. En contraposición, los sectores más volátiles han sufrido aumentos de la beta de forma generalizada.
No podemos predecir el futuro, pero el entendimiento del pasado puede ayudarnos en la toma de decisiones futuras. Para conocer con mayor detalle la evolución que han experimentado los principales parámetros financieros y macroeconómicos y entender la relación que existe entre ellos, entra en nuestra Presentación de Market Essentials.