Medidas para la modernización del sistema de transporte y la movilidad en la UE.
Asistimos en este mes de diciembre de 2021 a un tiempo complicado, complejo y convulso en Europa, debido a la propagación rápida y masiva de la variante Omicron del COVID 19 por todo el continente. Sin embargo, en materia de Movilidad todo parece caminar de manera diferente con un razonable optimismo en el futuro.
Con el objetivo de apoyar la transición hacia una movilidad más limpia, ecológica e inteligente, en consonancia con los objetivos del Pacto Verde Europeo, la Comisión Europea adoptó el pasado 14 de diciembre cuatro propuestas que modernizarán el sistema de transporte y la movilidad en la UE.
La primera aumentando la conectividad y trasladando más pasajeros y carga al ferrocarril y vías navegables interiores, la segunda apoyando el despliegue de puntos de recarga eléctrica y las infraestructuras alternativas de reabastecimiento de combustible y nuevas tecnologías digitales, la tercera poniendo un mayor énfasis en la movilidad urbana sostenible, y la cuarta facilitando la elección de diferentes opciones de transporte en un sistema de transporte multimodal eficiente. Sin duda, todas estas propuestas encaminarán al sector del transporte, entre otras más cosas, a reducir sus emisiones en un 90%.
Como dijo el vicepresidente ejecutivo del Pacto Verde Europeo, Frans Timmermans, “La transición verde y digital de Europa traerá grandes cambios en la forma en que nos movemos. Las propuestas de hoy encaminan la movilidad europea hacia un futuro sostenible”.
De estos importantes cuatro proyectos aprobados por la Comisión Europea, me gustaría detenerme especialmente en el que hace referencia a la Movilidad Urbana, por su repercusión más directa sobre la salud de los ciudadanos de la UE.
Las ciudades albergan a millones de personas. La propuesta aprobada aborda algunos de los desafíos de movilidad derivados de esta intensa actividad demográfica y económica: congestión, emisiones, ruido. El Marco de Movilidad Urbana establece una guía europea sobre cómo las ciudades pueden reducir las emisiones y mejorar la movilidad, incluso a través de Planes de Movilidad Urbana Sostenible. El enfoque principal estará en el transporte público y caminar y andar en bicicleta. La propuesta también prioriza soluciones de cero emisiones para flotas urbanas, incluidos taxis y servicios de transporte, la última milla de entregas urbanas y la construcción y modernización de centros multimodales, así como nuevas soluciones y servicios digitales. La propuesta traza las opciones de financiación para que los entes locales y regionales implementen estas prioridades. En 2022, la Comisión propondrá una Recomendación a los Estados miembros de la UE para el desarrollo de planes nacionales para ayudar a las ciudades a desarrollar sus planes de movilidad, aunque en España ya hace tiempo que las grandes ciudades se pusieron manos a la obra con la ayuda de los fondos Next Generation.
Cabe recordar que este es el segundo paquete de propuestas para apoyar una transición hacia un transporte más limpio y una movilidad más ecológica tras la publicación de la Estrategia de movilidad inteligente y sostenible de la Comisión en diciembre de 2020, hace justo un año. Es por ello por lo que cabría considerar estas nuevas propuestas de la C.E. como un auténtico regalo de navidad en el camino para conseguir una Europa con una movilidad más sostenible, más segura y conectada.