En líneas generales, los expertos consultados coinciden en calificar la inflación, que centra el primer bloque de preguntas de la encuesta, como una circunstancia persistente que se prolongará durante gran parte del año 2023. Para tratar de contener sus efectos, la práctica totalidad coincide en continuar con la política monetaria restrictiva, mientras que una mayoría amplia (85%) está de acuerdo con coordinar la política fiscal y la monetaria.
La mayoría de los expertos también considera que los incrementos salariales pactados hasta la fecha se sitúan en niveles aceptables para evitar espirales inflacionistas. Sin embargo, existe división en la percepción del esfuerzo de las empresas para evitar trasladar a precios el incremento de los costes: solo un 46% opina que las empresas están haciendo esfuerzos para contener el aumento de los precios.
En cuanto a previsión de recuperación del Producto Interior Bruto español a niveles previos a la pandemia de COVID-19, la mayoría de las economistas (70%) coincide en retrasarla hasta 2024 o incluso más adelante, un claro aumento respecto a la edición anterior de Pulso Trimestral, donde la que una mayoría más amplia (80%) la situaban a lo largo del año 2023.
También existe amplio consenso a la hora de valorar las finanzas públicas, ya que el 77% considera que el ritmo de consolidación fiscal no es el adecuado, mientras que el 92% apunta a la necesidad de presentar un plan con el objetivo de reducir el déficit de cara a próximos ejercicios. Por su parte, el proyecto de Presupuestos Generales del Estado también genera amplios consensos entre los economistas consultados: un 92% considera que los PGE no contemplan un escenario fiscal y monetario realista.
Finalmente, se ha querido tantear la opinión del panel de expertos acerca de medidas determinadas de política económica. Los expertos coinciden de manera unánime al considerar prioritaria la puesta en marcha de medidas por el lado de la oferta que mitiguen el impacto del shock de oferta provocado por la crisis geopolítica y económica derivada de la invasión de Ucrania. Respecto a la edición anterior del Pulso Económico Trimestral (junio 2022), el porcentaje de quienes consideraban esta propuesta como “altamente prioritaria” ha crecido del 57% al 100%.
El acuerdo que representa un pacto de rentas a varios años que distribuya el esfuerzo entre perceptores de rentas del trabajo (incluidos pensionistas) y del capital continúa siendo una medida prioritaria para la práctica totalidad de los consultados.
También generan un amplio consenso las medidas orientadas a conseguir una transición y autonomía energéticas (92% las considera prioritarias) así como de modificar del sistema de tarifas energéticas reguladas para contener el aumento de los precios (61%). En cuanto a las medidas para favorecer a los más afectados por la subida de precios, dos tercios consideran prioritaria la concesión de ayudas directas, mientras que la reducción selectiva de impuestos genera más división, estando prácticamente equilibrado el porcentaje de expertos que consideran que es prioritaria y el de los que no.
Por otro lado, las medidas que congregan menos respaldo tienen que ver con el aumento o la creación de nuevos tipos impositivos, como los gravámenes temporales a los ingresos de entidades de crédito o la regulación de un nuevo impuesto a la riqueza o con la subida de bases máximas de cotización a la Seguridad Social.
Publicado en Expansión