ey-borja-espana2025

El sector sanitario recupera la forma 

Temas relacionados

Financiación, tecnología y regulación marcarán la pujante transformación del sector sanitario en 2025

El Covid19 supuso un antes y un después en la gestión sanitaria y puso a nuestro país y a la Unión Europea en una situación de alta vulnerabilidad hasta que la Organización Mundial de la Salud dio por finalizada la pandemia en mayo del año 2023. Tras un periodo de recuperación, enfrentamos el año que viene con plena capacidad operativa.

España 2025. Un año por delante

Accede aquí al informe completo.

En el ámbito de la salud y de cara a 2025 destacamos cuatro aspectos clave que es preciso analizar y tener en cuenta: i) Impulsar la financiación del sistema y la colaboración público-privada; ii) Acelerar la transformación del modelo actual de asistencia sanitaria; iii) Adaptar la regulación en temas clave e iv) Incrementar la inversión para consolidar diferentes sub-segmentos creando empresas más sólidas e innovadoras.

Impulsar la financiación del sistema 

El sector sanitario y de ciencias de la vida tiene unas dinámicas de crecimiento del gasto imparables derivadas de la mayor innovación, una población cada vez más envejecida, una mayor cronicidad de las enfermedades asociado a un incremento en la esperanza de vida, y la mayor prevención e inversión en salud personal y estética. Estos factores están impactando de forma muy significativa en nuestro ecosistema, provocando desde el punto de vista de la financiación varios efectos:

  • La necesidad de un incremento de los presupuestos públicos destinados a la asistencia sanitaria, siendo totalmente necesario un Pacto de Sostenibilidad entre Administración Central y Autonómica que permita impulsar la equidad y asegurar la financiación del sistema de forma homogénea.
  • La redefinición del modelo “Muface” con un incremento de la prima por encima del 15% y posibles cambios en su modelo de funcionamiento.
  • Incremento significativo de las primas de compañías de seguros de salud, también a colectivos privados.
  • Mayor gasto destinado a profesionales de servicios de prevención y cuidado personal que deben cubrir un número creciente de categorías, desde suplementos a test diagnósticos, pasando por especialidades relacionadas con la estética y el deporte.

Acelerar la transformación del modelo actual de asistencia sanitaria

Con el fin de mitigar el crecimiento del gasto y garantizar la sostenibilidad del sistema, hay diferentes líneas de actuación, todas ellas de gran calado, que es preciso acometer sin más dilación: 

  • Incrementar el peso de la atención remota, de la atención ambulatoria y de todo lo relacionado con lo que llamamos “salud digital” a través de la telemedicina, de la redefinición de procesos que reduzca la asistencia del paciente al centro médico, así como el incremento de la utilización de los dispositivos médicos, apps digitales, realidad virtual, realidad aumentada y big data. Gracias a todas estas herramientas y mejora de procesos, se facilitarían las interacciones tanto remotas como presenciales, permitiendo un contacto ágil y efectivo entre los profesionales sanitarios y los pacientes y se reducirían de manera muy significativa los costes asociados a consultas o tratamientos.

  • Profundizar en la interoperabilidad del sistema, avanzando hacia sistemas de datos únicos a disposición del paciente, que le permita acudir a distintos centros sanitarios públicos y privados con su historia clínica.

  • Apoyar y facilitar desde las entidades públicas el desarrollo de nuevos productos más personalizados, como los productos biológicos y nuevas modalidades terapéuticas (terapias génicas y anticuerpos conjugados). Estas innovaciones requieren valoraciones previas para garantizar su aplicación al paciente. Con el fin de acortar los plazos que estos desarrollos siempre conllevan, las empresas están rediseñando sus procesos de innovación y desarrollo mediante la aplicación de Inteligencia Artificial y herramientas analíticas, así como sus cadenas de suministro, priorizando un enfoque basado en la sostenibilidad, la flexibilidad y la personalización.

Adaptar la regulación en temas clave

  • Evaluación de tecnologías sanitarias. Las evaluaciones nacionales se basarán, en parte, en los resultados de las evaluaciones conjuntas realizadas a nivel europeo, lo que está alineado con la normativa comunitaria que garantiza que las tecnologías más innovadoras sean evaluadas de manera ágil, rigurosa y transparente.

  • Digitalización de datos sanitarios. Como indicábamos anteriormente, tras la mejora en la interoperabilidad del sistema, el siguiente paso sería facilitar el intercambio de datos sanitarios y el acceso a estos a escala de la Unión Europea. Esto mejoraría el acceso de las personas a sus datos sanitarios electrónicos personales y su control sobre ellos, permitiendo al mismo tiempo la reutilización de determinada información con fines de interés público, de apoyo a las políticas y de investigación científica.

  • Telemedicina e Inteligencia Artificial. Esta tecnología emergente se mantendrá e incrementará su uso como una herramienta clave en la prestación de servicios sanitarios. Sería necesario que el marco jurídico evolucione y se introduzca en la regulación este tipo de prestación sanitaria para adaptarlo a las nuevas realidades del sistema sanitario de forma ágil. A nivel legal, será necesario redefinir la responsabilidad en caso de errores cometidos por sistemas de IA, así como asegurar la transparencia de los algoritmos utilizados. 

Incrementar la inversión y la colaboración público-privada para consolidar diferentes sub-segmentos creando empresas más sólidas e innovadoras. 

  • El sector sanitario y de ciencias de la vida continúa siendo muy atractivo para los mercados. De hecho, más de los 80% de los fondos capital riesgo lo mantiene como una prioridad dentro de su estrategia de inversión. Además, aunque el exceso de valoración de la etapa del Covid 19 se corrigió a partir de 2023-2024, el sector sigue siendo prioritario para distintos tipos de inversores.

  • Existe un el alto interés en consolidar verticales donde la presencia del sector privado es relevante tales como dermatología, estética o salud mental, dental, CROs, CDMOs, fabricantes de APIs e ingredientes, pharma services, med-tech y distribución. 

  • El ecosistema de la salud digital también está generando mucho interés y es donde observamos valoraciones más altas. Se trata de un ámbito en plena transformación que aportará novedades relevantes a lo largo de 2025.

  • Es necesario cerrar un acuerdo de colaboración ambicioso entre el sector sanitario y la Administración Central que defina de una forma clara y transparente las “reglas del juego”. Se trataría de contar con un pacto bien articulado para los próximos años que permita seguir atrayendo inversiones, tanto a nivel de Investigación y Desarrollo, como en la construcción de nuevas fábricas y lanzamiento de nuevos medicamentos, que reduzcan la enorme dependencia de España y la Unión Europea de terceros países. Este marco de actuación conllevaría de manera casi inmediata el incremento de las inversiones y de los niveles de empleo, tener mejores herramientas para retener o atraer a nuestros investigadores, así como contar con los medicamentos y equipos médicos de última generación. 

La inversión en el sector permitirá avanzar en la consolidación de los actores relevantes que participan en el ecosistema, con empresas más sólidas, con mayor capacidad de innovación y con un marcado perfil internacional.

Por lo tanto, 2025 continuará siendo un año de enormes oportunidades en un sector que está en plena transformación de su modelo operativo, con altas implicaciones a nivel regulatorio y con un potencial enorme para seguir siendo un polo de atracción de inversiones.

Publicado en El Español

Resumen

El Covid-19 marcó un antes y un después en la gestión sanitaria, finalizando en mayo de 2023. Para 2025, se destacan cuatro aspectos clave: i) Impulsar la financiación del sistema y la colaboración público-privada; ii) Acelerar la transformación del modelo de asistencia sanitaria; iii) Adaptar la regulación en temas clave; iv) Incrementar la inversión para consolidar sub-segmentos y crear empresas más sólidas e innovadoras. La inversión en salud digital y la colaboración público-privada serán esenciales para avanzar en la sostenibilidad y la innovación del sector.

Acerca de este artículo

Autores