Es difícil que la movilidad internacional se detenga por completo; sin embargo, existen modificaciones en las estructuras de las asignaciones por parte de las organizaciones. Es posible que veamos menos esquemas de asignaciones de largo plazo y, en su lugar, las empresas estarán buscando traer talento para capacitar al local y así potenciar las facultades de la mano de obra de cada país.
Los temas migratorios seguirán cobrando gran relevancia para muchas compañías que invierten en otros países y necesitan mano de obra extranjera para operar con éxito. México cuenta con opciones de visado que se ajustan a las necesidades de los negocios, la clave para las empresas es aprovechar las flexibilidades que otorga la legislación migratoria para optimizar sus operaciones, diseñar una planeación holística y contemplar una asesoría alineada por un enfoque fiscal, laboral y de seguridad tanto social como migratoria.
Para hacer frente a los efectos de las nuevas disposiciones de movilidad, antes de realizar un viaje es importante revisar cuáles son las condiciones que tiene el país de destino (visa, prueba de COVID-19, entre otros), no solo para el ingreso al territorio sino para el tránsito interno. Aunque las fronteras estén abiertas, no se descartan las restricciones de movilidad local que podrían frustrar el propósito del viaje.
Cabe destacar que EY cuenta con Immigration Tracker, una herramienta que ayuda a las personas a confirmar si pueden ingresar o no a un país y si existen restricciones locales. Esta información puede consultarse en el siguiente link.