En la práctica, la capacidad de la tecnología digital para trascender las fronteras es parte de su atractivo. Sin embargo, las leyes se basan en un mundo que se define con fronteras, y dentro de ellas, hay leyes que siempre cambian relativas a la privacidad de datos, comercio, transacciones, propiedad intelectual, criptomonedas y muchas más.
La plataforma digital de una organización es una conexión con sus clientes y, con ella, una organización debe confirmar que no sólo cumple con las leyes y regulaciones de comercio electrónico, sino que también protege sus intereses al interactuar a través de su plataforma digital. La ley integrada de EY y los servicios fiscales son particularmente críticos, ya que los aspectos fiscales y legales de un negocio en línea están tan entrelazados que pueden ayudar a los clientes a:
- Abordar la protección de los consumidores y las leyes de competencia a medida que se desarrollan y evolucionan las capacidades del comercio electrónico.
- Construir el marco legal de un negocio de e-commerce mediante la redacción de acuerdos legales para su uso en línea.
- Proteger adecuadamente la propiedad intelectual digital
- Facilitar el cumplimiento de los requisitos globales de privacidad de datos para una empresa digital
- Asesoría sobre la base contractual para la contratación en línea, incluida la preparación de las condiciones de uso y el uso de firmas digitales.
- Ayudar con los acuerdos contractuales necesarios para que las instalaciones digitales del cliente despeguen, incluyendo licencias de software, acuerdos de diseño de sitios web y acuerdos de investigación y desarrollo.