Determinar qué se va a construir: Mantener las actividades de impuestos y finanzas dentro de la organización generalmente requiere cierto grado de transformación interna dirigida a optimizar el personal, los procesos, los datos y la tecnología existentes. A menudo, las empresas querrán mantener o desarrollar actividades que se consideran de mayor valor, o las mejores de su clase, ya que deben realizarse con una efectividad y control óptimos.
Ejemplos de actividades de talla mundial incluyen la planeación fiscal y la gestión de controversias.
Determinar qué comprar: Las actividades que se consideran de menor valor, o las mejores en costo, deben realizarse a un costo mínimo a través de la centralización, el abastecimiento desde ubicaciones más económicas, o a través de terceros. Esto proporciona una alta eficiencia en el desempeño de esas actividades a un menor costo. Algunas actividades típicas con objetivos de menor costo incluyen la realización de declaraciones de impuestos y la recopilación de datos.
Encontrar la mezcla adecuada: Una vez que se ha tomado la decisión de designar una actividad como la mejor de su clase o la mejor por el costo, las empresas deben decidir si quieren "apropiarse" de esa tarea manteniéndola in-house o, alternativamente, "comprar" o subcontratar la tarea a un proveedor externo. Muchas empresas eligen un enfoque híbrido para maximizar la efectividad y eficiencia de su función tributaria.
In-House vs outsourcing